ESTA VEZ ES DISTINTO: OCHO SIGLOS DE NECEDAD FINANCIERA

Esta vez es distinto

        Con la obra “Esta vez es distinto: ocho siglos de necedad financiera”, los autores, Carmen M. Reinhart y Kenneth S. Rogoff, buscan hacer una crítica a la sociedad que cae, una y otra vez, en el síndrome de “esta vez es distinto”, creyendo que, como hemos avanzado y, por tanto, hemos aprendido de los errores y somos más inteligentes, no entraremos en crisis. 

Carmen M. Reinhart y Kenneth S. Rogoff

Llevan a cabo dicha crítica mediante la exposición y explicación de datos financieros que han tenido lugar antes, durante y después de muchas crisis financieras en los últimos ocho siglos en 66 países repartidos en los cinco continentes y, mediante esta información, establecen una serie de indicadores y umbrales que determinan cuando un país va a entrar en recesión o salir de la misma.

Además, los autores hablan de la intolerancia a la deuda, que se introduce para hacer referencia a los países que son más vulnerables a incurrir en impagos. Para medir el grado de intolerancia, los autores usan dos indicadores: las calificaciones sobre deuda soberana y la proporción de deuda externa respecto al Producto Nacional Bruto.

Tras un breve prologo, en el primer capítulo se hace un resumen con los distintos tipos de deuda (deuda externa, deuda total del gobierno, deuda pública interna, deuda pública interna en divisas extranjeras y deuda del banco central) y tipos de crisis (crisis bancaria, crisis de deuda externa y crisis de deuda interna), donde se establecen diferentes umbrales para determinar cuando un país esta entrando o saliendo de las diferentes crisis. Durante los capítulos del 2 al 5, los autores hablan de los tipos de crisis antes explicados y refutan mediante ejemplos y sus indicadores situaciones vividas por muchos países. 

Deuda

“No hay nada nuevo salvo lo que se ha olvidado” (Rose Bertin) es una reflexión en torno a la sexta parte del libro. Los indicadores que muestran información acerca de si una economía presenta alguno de los síntomas que se manifiestan antes de que se desate un contagio financiero. El verdadero problema se halla en que los responsables de las políticas económicas no reconocen los indicadores de alerta temprana que muestra la evidencia histórica, lo cual abre el camino para darle un nuevo enfoque al desempeño de las instituciones.

        A lo largo de la obra he comprendido que la crisis no son cosas que ocurren sin ningún sentido o a causa de un pequeño error, al contrario, suceden debido a continuos errores. Si prestamos atención, podemos prevenirla. El mensaje que me ha dejado el libro es “Quizá esta vez parezca distinto pero realmente hemos estado antes en el mismo sitio”